Rompiendo Cadenas De Adiccion
Actitudes Que Te Mantienen Prisionero
Egoista
Los sabios son dadores, no tomadores. Son generosos. Siempre que es posible, dan de su tiempo, energÃa y recursos para ayudar a otros. Invierten en las personas, sin expectativas de obtener algo a cambio. Dan libremente con la generosidad de su corazón.
Los imprudentes son tomadores, no dadores. Son egoÃstas y codiciosos. Son tacaños con su tiempo, energÃa y recursos. Solo dan cuando creen que pueden obtener algo a cambio. Se resisten a dar debido a la dureza de su corazón.
Ser un dador es una forma de pensar; es una forma de pensar que proviene de nuestra relación con Jesús, quien es el Dador supremo. Este es el mensaje de Pablo en Filipenses 2: “No hagáis nada por rivalidad o vanidad, sino que con humildad consideren a los demás más importantes que ustedes. Deje que cada uno mire no solo sus propios intereses, sino también los intereses de los demás. Tengan esta mente entre ustedes, que es la suya en Cristo Jesús â€.
Ser un dador es una batalla del corazón. Es fácil ser egoÃsta. El impulso natural es buscar sus propios intereses, perseguir su propia agenda y cuidarse a sà mismo. Pero el egocentrismo no es el camino del reino de Dios. No es fruto del EspÃritu. Es el camino de la oscuridad.
Considera esto: Jesús te ama y murió por ti sabiendo que quizás tú no lo ames. Aquellos que han reconocido y respondido al gran don de Dios en Cristo están llamados a seguir el ejemplo del Salvador y ser dadores.
"¡Inclina mi corazón a tus testimonios y no a la ganancia egoÃsta!" (Salmo 119.36)
Los imprudentes son tomadores, no dadores. Son egoÃstas y codiciosos. Son tacaños con su tiempo, energÃa y recursos. Solo dan cuando creen que pueden obtener algo a cambio. Se resisten a dar debido a la dureza de su corazón.
Ser un dador es una forma de pensar; es una forma de pensar que proviene de nuestra relación con Jesús, quien es el Dador supremo. Este es el mensaje de Pablo en Filipenses 2: “No hagáis nada por rivalidad o vanidad, sino que con humildad consideren a los demás más importantes que ustedes. Deje que cada uno mire no solo sus propios intereses, sino también los intereses de los demás. Tengan esta mente entre ustedes, que es la suya en Cristo Jesús â€.
Ser un dador es una batalla del corazón. Es fácil ser egoÃsta. El impulso natural es buscar sus propios intereses, perseguir su propia agenda y cuidarse a sà mismo. Pero el egocentrismo no es el camino del reino de Dios. No es fruto del EspÃritu. Es el camino de la oscuridad.
Considera esto: Jesús te ama y murió por ti sabiendo que quizás tú no lo ames. Aquellos que han reconocido y respondido al gran don de Dios en Cristo están llamados a seguir el ejemplo del Salvador y ser dadores.
"¡Inclina mi corazón a tus testimonios y no a la ganancia egoÃsta!" (Salmo 119.36)
Si tu identificaste la actitud negativa de Egoista en tu IMD hoy, tome un tiempo para completar este devotional. Leete cada pasaje empesando con
(Salmo 119.36)
Medita en este versiculo(s). Continue con el proximo pasaje hasta completar todos los pasajes. Es imperativo que permites el Espiritu Santo que nos confronte con nuestras actitudes pecaminosas y defectos de caracter, y que tomemos responsabilidad por nuestro comportamiento sin hacer escusas. Esto requiere mirar con honestidad las intenciones de nuestro corazon si vamos a permitir que Dios obre en estas areas. Pidele al Señor que revele la verdad detras de estos actitudes. Nuestros corazones son engaños y intentara a esconder las rasones verdaderas detras de estos comportamientos. Asegurate de escribir cualquier revelacion de el Espiritu Santo, especialmente de donde vienen.
(Salmo 119.36)
Medita en este versiculo(s). Continue con el proximo pasaje hasta completar todos los pasajes. Es imperativo que permites el Espiritu Santo que nos confronte con nuestras actitudes pecaminosas y defectos de caracter, y que tomemos responsabilidad por nuestro comportamiento sin hacer escusas. Esto requiere mirar con honestidad las intenciones de nuestro corazon si vamos a permitir que Dios obre en estas areas. Pidele al Señor que revele la verdad detras de estos actitudes. Nuestros corazones son engaños y intentara a esconder las rasones verdaderas detras de estos comportamientos. Asegurate de escribir cualquier revelacion de el Espiritu Santo, especialmente de donde vienen.